jueves, 8 de mayo de 2008

Maniiiii, Manicera, mani, maniiiiii, Ay Anita no te acuestes a dormir.....

Durante la década de los 1950 y 60s, la gente solia visitar los cines "Principal" e "Internacional", que quedaban en la Avenida principal de Cabimas.

En la entrada de alguno de ellos (porque se turnaba de uno a otro) te podias conseguir a una vendedora de maní llamada Ana Pirela Ruiz. Todos la conocian como Anita "La Manicera".

Fue una destacada repostera dentro de su comunidad; hacía excelentes dulces caseros y vendía cocadas y maní en concha-tostado. Solía llevarlos en un canasto grande mientras iba ataviada de un sombrero de paja, recorriendo las calles del centro de Cabimas.

Fue muy apreciada por el padre Brinez, párroco de la Catedral de Cabimas; a ella le encantaba bailar en las celebraciones en honor a san Benito, al son de los chimbangueles, engalanada con flores en la cabeza. El Instituto Municipal de Cultura y Bellas Artes, actualmente Fundacultura, la homenajeó antes de morir, reconociendo su labor popular en la ciudad.

Me cuentan algunos ya mayores, que se arreglaba y pintaba los cachetes, los labios , y salia a vender el mani a la hora del cine, pregonando: "Maní tostado pa' los enamorados ".

Y a los muchachos que les eran conocidos, les fiaba. Vivia en una casita por La Gran Cruzada en el casco central de Cabimas.

Fallecio en 1997 a los 80 años.

Rafael Rangel